Hola a todos, me alegro mucho de que el blog (a pesar de los pocos comentarios que tiene, jeje) lo está visitando mucha gente. Eso es buena señal.
He estado de exámenes y no he tenido casi tiempo para dedicarme a la lectura personal (lo siento, pero me siengo a reseñar un libro sobre Ética Periodística, jajaja).
Así pues, Fabuland es el primer libro que he terminado después de las lecturas obligatorias. De antemano debo decir que NO ESTÁ A LA VENTA TODAVÍA. Se pondrá en febrero si no me equivoco, y desde ya os lo recomiendo al 200%.
Sin nada más que añadir, os dejo con la reseña. Gracias por leerme.
Fabuland es un universo múltiple en el que tienen cabida todos mis sueños de infancia y juventud. Pero soy consciente de que no todos los jugadores tienen las mismas aficiones. A algunos les gusta más la fantasía épica, a otros las naves espaciales. Yo les doy a elegir entre una y otras. Recuerde lo que decía Michael Ende: Fantasía no tiene fronteras.
Fabuland es más que un videojuego Online. De hecho, es más que todos los libros, novelas gráficas, bandas sonoras originales y figuritas articuladas que han salido a raíz de ello. Fabuland es un modo de vida, al menos para Kevin; un adolescente americano que no se despegaría del ordenador si no fuera porque tiene que comer, asearse de vez en cuando y asistir al colegio. Para este joven, la vida en el mundo real es aburrida, monótona y demasiado deprimente: él disfruta más convirtiéndose en Rob, el valiente y pequeño guerrero Baruk, y recorriendo junto a la... ¡Ups!, el gregoch Naj, el inmenso mundo digital de Fabuland en busca de misiones que resolver para subir de nivel.
Sin embargo, por desgracia para Kevin, sus maravillosas vacaciones sin padres de por medio y sin deberes, se ven truncadas cuando conoce a una chica llamada Martha que le obligará a relacionarse con el mundo exterior y a ver más allá de lo que el mundo virtual puede ofrecerle.
Con esta premisa, Jorge Magano va hilando una historia divertida y original en la que tan importante es la vida de Kevin Dexter como la de Rob Macguire. Sin olvidar valores tan necesarios para la vida como la lealtad, la amistad, la valentía y la justicia, el autor va dando forma a la personalidad del chico, cuya madurez no sólo se reflejará en las hazañas del pequeño guerrero baruk, sino también en las del propio Kevin.
No puedo dejar de mencionar las referencias que existen a multitud de videojuegos, a programas informáticos y a autores que muchos lectores conocerán. Detalles que le dan un realismo increible a la novela y acercan todavía más a los personajes y a la historia. Más de uno se verá reflejado en numerosas situaciones, estoy seguro.
Con aventuras trepidantes, monstruos malignos, conversaciones de messenger, magos tenebrosos, viajes furtivos y, porque no, un poco de amor, el autor consigue salirse de los estereotipos en esta clase de novelas y hacer disfrutar y reír (no es una forma de hablar) a todo aquel que decida seguir las andanzas de Rob y Kevin.
Así pues... ¿Te atreves a registrarte en Fabuland?
Número de páginas: 200
Editorial: Espasa
Precio: 15,95 €
Nota final: 8,5/10